En alguna medida puede decirse sin lugar a dudas que actualmente nadie existe o está en el mundo si no se encuentra en las redes sociales. Aunque Facebook fue la pionera (es prácticamente un genérico de las redes), actualmente la diversificación es amplia y cada vez más segmentada, con Instagram a la cabeza entre los más jóvenes. Los motivos que llevan a estar o visitar las redes sociales son muy diversos. Desde el mero entretenimiento, lugar de expresión, de contacto, por curiosidad de lo que hacen otros, para sentir la pertenencia a un grupo o evitar la soledad e inquietud personal.
Sin embargo, sabemos que una continuada exposición a las redes sociales tiene un efecto depresor sobre los más insatisfechos. Es la llamada ‘Depresión de Facebook’, o tristeza que causa a los más infelices ver felicidad en los demás.
¿Qué es la Depresión de Facebook?
Actualmente los tiempos de exposición diaria a las pantallas de ordenador y móviles entre jóvenes y adultos son muy elevadas. En concreto, las redes sociales se llevan la mayor parte de este consumo hasta el punto de llegar a producir adicción en muchas personas. En este sentido, diversos estudios han mostrado que ansiedad y depresión se relacionan con el abuso de los ordenadores o dispositivos móviles.
¿Cuál es la razón de esta tendencia a la depresión?. La causas son muy variadas, pero una de ellas es posiblemente la ansiedad e insatisfacción personal vital. Hay que tener en cuenta que la mayor parte de los mensajes que recibimos en nuestra sociedad se encaminan hacia la búsqueda de una constante felicidad, de tener muchos amigos, posesiones o éxito social. Este estándar aspiracional se refleja en las redes sociales, en donde todo el mundo muestra su mejor cara, una permanente felicidad de pequeños momentos, viajes, grupos de amigos, o ‘selfies’ con poses forzadas y caras de profunda satisfacción. Casi nadie cuenta ni publica sus experiencias negativas.
Concretamente, diversos estudios con jóvenes y adultos han demostrado que, a mayor tiempo empleado en Facebook, peor es el estado de ánimo. En general se han medido niveles de satisfacción vital, salud física y mental. Por lo tanto, la explicación más plausible es que el seguimiento y observación de las interacciones de los demás en las redes sociales reste valor a las propias experiencias, principalmente si está inquieto, frustrado o insatisfecho con la propia vida. De esta forma, quien lo ve tiende a compararse, produciéndose un profundo sentimiento de frustración en la creencia de que su vida no es la que debería de ser, que es incompleta y vacía, que a los demás les va mejor en todo.
Satisfacción vital y autoestima
Como hemos indicado, actualmente parece obligado ser feliz en todo momento y lugar. Sentimientos naturales como la tristeza no son fácilmente aceptados. Apenas se conciben los baches personales o malos momentos. Ser feliz es casi un deber, ser infeliz está prohibido. Tiene lógica que las personas más inseguras y descontentas, cuando entran en las redes sociales, resten valor a sus propias experiencias frente a las de los demás. Y también tiene sentido que busquen la interacción en las redes para sentir compañía, relacionarse, calmar su inquietud, ver lo que otros hacen o imitarlos. Y es ahí en donde muchos se pillan los dedos. Quienes no han podido llenar sus vidas con las satisfacciones y necesidades personales más elementales, psicológicamente necesarias para el desarrollo de la autoestima e identidad personal. Recordemos al psicólogo Abraham Maslow que afirmaba que no es posible evolucionar hacia un estado de bienestar personal si las necesidades humanas más básicas no han sido cubiertas.
Por lo tanto, si bien las redes sociales son un medio actualmente imprescindible de comunicación social, su abuso captura a los más insatisfechos, a los más infelices e inseguros con sus vidas. Estos, para no ser menos, acabarán imitando una felicidad que otros dicen tener y se convertirán en anunciantes de una falsa vida feliz que, sin embargo, nunca reducirá su insatisfacción más profunda.
José de Sola
Psicólogo psicoterapeuta en DE SALUD PSICÓLOGOS