El Brainspotting es una técnica desarrollada a partir del EMDR en los primeros años del presente siglo por David Grand. El término Brainspotting proviene del inglés “brainspot” que significa “punto cerebral”. Se refiere a una determinada posición del ojo relacionada con la activación en una zona del cerebro respecto a un recuerdo o contenido, en forma de imagen, emoción o sensación corporal.
El Brainspotting activa y facilita la capacidad innata de autocuración, presente en cada uno de nosotros.
¿Cuál es la utilidad del Brainspotting?
Son muchas las utilidades del Brainspotting. Entre ellas se encuentra el tratamiento del estrés postraumático, el trauma tras un accidente, por enfermedad o intervención médica, en situaciones de guerra, atentado o por catástrofes naturales. También es útil en problemas de rendimiento deportivo o de creatividad, fibromialgia y dolores crónicos, adicciones, TDA y TDAH. Igualmente ha mostrado buenos resultados en casos de tartamudez, fatiga crónica, fobias, asma, ira y enfado, o el miedo y ansiedad, depresión, entre otras.
En términos positivos, es útil en la potenciación de recursos o aumento y capacidades, principalmente en bloqueos emocionales o problemas de rendimiento.
El Brainspotting es un tratamiento basado en la integración cerebral que asume que desde el campo visual, y a través de posiciones oculares concretas, podemos localizar focos emocionales anclados o encapsulados.
Una vez localizadas estas posiciones oculares, y mediante el mantenimiento de la fijación ocular en un punto concreto o ‘brainspot’, se llega a la resolución de problemas emocionales almacenados en las áreas no-verbales y no-cognitivas del cerebro. El objetivo es lograr la liberación de la activación guardada, tanto en el cerebro como en el cuerpo. Realmente, y en términos sencillos, se produce un desbloqueo de emociones ancladas a vivencias no resueltas como pueden ser una pérdida, un despido, un abuso o un accidente, entre otros. Dichas emociones se localizan en zonas cerebrales específicas que pueden activarse a través de su identificación en puntos visuales concretos.
El Brainspotting es útil tanto con un problema como en la potenciación de recursos positivos. Este modelo está orientado a lograr una experiencia fisiológica a través del cuerpo, que es el gran receptor de nuestras emociones y sentimientos.
El tratamiento psicoterapéutico con el Brainspotting
Todos tenemos la experiencia de que cuando hablamos de algo tendemos a mirar a un punto concreto en el espacio. Así, el donde miramos determina cómo nos sentimos ante un tema o problema. Y esencialmente en esto se basa el Brainspotting, en la localización de esos puntos, o ‘brainspots’ de la mirada que tienen correspondencia con zonas concretas del cerebro. La localización de estos puntos abre de forma natural el proceso de procesamiento.
Recientemente, diversos estudios ya han demostrado la eficacia del tratamiento con Brainspotting como técnica coadyudante en la psicoterapia en relación con otras técnicas clásicas.