El Síndrome de Asperger

El síndrome de Asperger se caracteriza por dificultades en la interacción social y en la comunicación, manifestándose en un interés en actividades muy restringidas, de forma obsesiva, con exclusión de otros temas.

La inteligencia suele ser normal o por encima de la media, pero con rutinas o rituales repetitivos, así como con una tendencia a hablar de manera muy formal o monótona. El comportamiento social y emocional es inadecuado, con incapacidad de interactuar con los demás, existiendo torpeza y ausencia de empatía. Es más frecuente en hombres y suele detectarse en edad escolar.

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¿Cuáles son las consecuencias del síndrome de Asperger?

Las principales consecuencias del síndrome de Asperger se relacionan con la dificultad de establecer unas adecuadas relaciones sociales, no porque no quieran, sino por la falta de habilidades y de empatía.

En general, el síndrome de Asperger tiene consecuencias en las relaciones familiares, de pareja y sociales, en el uso del lenguaje con fines comunicativos, o en comportamientos repetitivos o muy perseverantes. Esto afecta también a áreas laborales o académicas en donde la relación con otros es importante.

¿Cuáles son los síntomas del síndrome de Asperger?

Los principales síntomas del Asperger son:

  • Interacciones sociales escasas o inadecuadas.
  • Conversaciones que siempre se refieren a ellos mismos.
  • Lenguaje muy repetitivo, incapacidad en la comunicación.
  • Falta de empatía con los demás.
  • Obsesión y reiteración por temas fijos que les interesan.
  • Movimientos torpes con comportamientos y gestos extraños.
  • Comprensión literal del lenguaje, sin detectar el contexto.
  • Rituales y rutinas frecuentes.

Juegos para niños con autismo

Diferencias entre el autismo y el síndrome de Asperger

Aunque el síndrome de Asperger forma parte del espectro de trastornos autistas, en general, en el autismo las alteraciones del desarrollo son muy evidentes desde los primeros tres años de vida. Sin embargo, el Síndrome de Asperger se diagnostica a una edad más avanzada, alrededor de los siete años, o incluso en la adolescencia.

En muchos casos el autismo se acompaña de cierto deterioro intelectual. Sin embargo, en el síndrome de Asperger no existe evidencia de retrasos, e incluso se reflejan muy buenos resultados en las pruebas de inteligencia. Algo que también ocurre en el área del lenguaje. En el autismo se muestra un importante retraso con un vocabulario muy pobre. Sin embargo, las personas con Asperger tienen un vocabulario adecuado a su edad, e incluso elevado, pudiendo llegar a ser pedantes, incapaces de empatizar, de captar las señales de los demás en una conversación.

Finalmente, y respecto de los intereses, tanto en el autismo como en el Síndrome de Asperger se aprecia un área de interés muy limitado y obsesivo. Sin embargo, las personas con Asperger muestran intereses de un alto nivel que les pueden llevar a sobresalir en determinados campos de la ciencia. Se dice que Albert Einstein padecía de Asperger.

El abordaje del síndrome de Asperger

Internet y las posibilidades del mundo online han abierto una ventana para las personas con Asperger que, de esta forma, no tienen que enfrentarse a los retos de la interacción personal. La redes sociales y Facebook se han convertido en un espacio en donde un adulto con Asperger puede relacionarse con otros que comparten sus mismos códigos.

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